Lo principal que quería de mi vestido era algo cómodo y minimalista. Siempre me imaginé el vestido más sencillo, algo así como el Summer, pero cuando me probé el Honey silk, me sentí ceñida, cómoda y segura, sin estar rígida. ¿Si eso tiene sentido? La estructura del vestido hizo que se adaptara perfectamente a mi figura sin necesidad de hacer ninguna modificación. Tenía ese aire minimalista pero también era muy favorecedor para mi figura. La reacción de mis amigos de confianza y con estilo en la prueba me convenció.